Si recién te compraste un smartwatch, ¡felicitaciones! Estás por arrancar una experiencia tecnológica que combina estilo, funcionalidad y practicidad en tu vida diaria. Y como con cualquier dispositivo que querés que te dure, hay algunos cuidados básicos que pueden marcar la diferencia.
1. Mantenelo limpio (pero con cariño)
Un repasito cada tanto con un paño suave y apenas húmedo alcanza para sacarle la transpiración, polvo o suciedad que se va acumulando. Evitá los productos químicos fuertes o los paños abrasivos, que pueden dañar la pantalla o el cuerpo del reloj.
2. Cargalo correctamente
No uses cualquier cargador. Siempre que puedas, usá el original o uno compatible de buena calidad. Evitá cargarlo al 100% todo el tiempo o dejarlo enchufado horas de más —como pasa con el celular, eso afecta la batería a largo plazo.
3. Ojo con el agua (aunque sea resistente)
Muchos smartwatches tienen resistencia al agua, pero no son indestructibles. Si dice “resistente a salpicaduras”, no es lo mismo que “sumergible”. Antes de meterlo a la pileta, fijate bien en las especificaciones del fabricante.
4. Cuidá el software tanto como el hardware
Mantené tu reloj actualizado para que funcione de forma fluida y segura. Revisá cada tanto si hay actualizaciones en la app o en el propio dispositivo, y seguí los pasos que indica.
5. Tratá la correa con amor
Las correas también necesitan atención. Si es de silicona, un lavado rápido cada tanto con agua tibia basta. Si es de cuero o tela, conviene no mojarlas y guardarlas en un lugar seco cuando no las usás.
Tu smartwatch puede acompañarte mucho tiempo si lo cuidás bien. Y si en el camino descubrís que querés sumar más tecnología a tu rutina, te invitamos a visitar nuestra tienda online para seguir equipándote con lo último. Siempre hay algo nuevo para vos
😉
Hasta la próxima, dotpixer!

Comentarios
Publicar un comentario